Millones de ticos, sobre todo los empleados públicos, aprovechan estos 10 días de asueto para vacacionar, mientras otros utilizan estos días para reafirmar su religiosidad reflexionando o asistiendo a diferentes liturgias relacionadas con la pasión, muerte y resurrección de Jesús, que resumen la fe cristiana.
Precisamente, cientos de josefinos recorrieron las principales calles de esta capital en las distintas procesiones por la Semana Mayor, desde la de las palmas benditas hasta el viacrusis.
La menor participación en esas liturgias puede estar relacionada con la disminución de los feligreses católicos, que se calcula en un 25 por ciento en los últimos años, muchos de ellos atraídos por las denominaciones evangélicas.
Por otra parte y desde hace algunos años, los ticos aprovechan esta festividad religiosa más para vacacionar, viajar y visitar familiares que para la reflexión.
Tal es así que la Fuerza Pública tica destinó más de dos mil agentes para garantizar la seguridad en las carreteras y centros de recreo del país, que desde el sábado pasado comenzaron a ver incrementados el número de vacacionistas, gracias a un decreto presidencial que incluyo lunes, martes y miércoles al habitual feriado de jueves y viernes santos.
Asimismo, el lunes próximo está incluido en ese asueto porque por decisión legislativa los feriados nacionales son transferidos al segundo día de la semana para incrementar las visitas a los distintos centros recreativos del país, por lo que el descanso relacionado con la celebración de la Batalla de Rivas (11 de abril) pasó al día anterior.
De otro lado, el Ministerio de Salud de Costa Rica alertó este viernes sobre un brote de malaria en la caribeña provincia de Limón, con la detección de 60 casos de la especie falciparum, 35 pacientes masculinos y 25 femeninos.
En audio distribuido por la oficina de prensa de esa cartera, el director de Vigilancia de la Salud, Rodrigo Marín, señaló que tras las investigaciones realizadas en campo para la atención de este evento, no se logra identificar que los casos sean importados.
La malaria o paludismo -explicó- es una enfermedad causada por un parásito del género Plasmodium y transmitido a las personas principalmente por la picadura de un mosquito hembra del género Anopheles.
Este padecimiento, prosiguió, se ha presentado en Costa Rica con características de endemia desde el siglo XVIII, se restableció la transmisión en amplias regiones de la Vertiente Caribe y se dispersó a otras áreas del país.
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