Según fuentes palestinas, el domingo ingresaron al lugar mil 531 colonos y ayer otros 912, en medio de crecientes tensiones con los palestinos y países vecinos por la actuación de los agentes en el sitio, donde está ubicada la mezquita de Al Aqsa.
Los judíos recorrieron la zona como parte de los festejos por la Pascua, alertó la agencia oficial de noticias Wafa.
Antes de las incursiones, la policía desplegó sus fuerzas y unidades especiales en el complejo religioso y sus alrededores, denunció.
Desde el inicio de la Pascua judía la pasada semana, las fuerzas del orden israelíes despejan a diario la Explanada de las Mezquitas o Monte del Templo de los fieles palestinos para permitir la entrada de los colonos y radicales.
Los uniformados utilizan porras, balas de goma y gases lacrimógenos para obligar a los musulmanes a abandonar el recinto, una situación que provocó una ola de críticas internacionales.
En respuesta, milicias palestinas lanzaron cohetes hacia Israel desde la franja de Gaza y el sur del Líbano, lo, cual, a su vez, provocó una represalia de ese país.
En medio de ese panorama, el portavoz presidencial palestino, Nabil Abu Rudeina, advirtió ayer a Israel sobre una escalada de violencia en Oriente Medio por sus continuos asaltos a la mezquita.
Los ataques diarios contra los lugares sagrados y los fieles durante el Ramadán, mes sagrado para los musulmanes, son acciones inaceptables que inflamarán la región y la arrastrarán al abismo, recalcó.
La zona es venerada tanto por musulmanes, que la llaman Noble Santuario, como por judíos, que la conocen como el Monte del Templo.
Israel ocupó la zona oriental de la metrópoli en la guerra de 1967, y desde entonces mantiene bajo su control el territorio pese a las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
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