El proceso interno en el PRD hacia comicios generales de 2024, al igual que en la organización Realizando Metas, del expresidente Ricardo Martinelli ( 2009-2014), no está exento de crecientes diferencias entre los principales aspirantes a la Presidencia de la República.
Hasta la fecha unas tres figuras conocidas anunciaron oficialmente su postulación para ese cargo, entre ellas sobresale el vicepresidente de la República, José Gabriel Carrizo, para muchos el abanderado de la organización política.
Otros contrincantes de peso que adelantaron esa aspiración, son el actual titular de la Asamblea Nacional (parlamento), Crispiano Adames; y el exsecretario general del PRD, Pedro Miguel González, ahora líder de la facción opositora denominada Movimiento de Rescate Nacional.
Carrizo presentó esta semana su candidatura con llamados a la unidad.
“En el PRD somos diversos, tenemos distintos talentos, podemos opinar diferente, nos podemos hasta retar y podemos criticar. Pero nunca conspirar. Debemos luchar unidos para que cada uno de los miembros de esta gran familia tenga la misma oportunidad”, remarcó en su discurso.
Mientras González ha sido de los más críticos dentro del colectivo y recientemente manifestó su rechazo al clientelismo, el cual se ha entronizado en la agrupación, lo cual genera falta de actitud propositiva frente a las políticas gubernamentales.
En los últimos siete días también autoridades de Panamá, Estados Unidos y Colombia se comprometieron a enfrentar de manera mancomunada el tráfico de migrantes irregulares en su paso por la selva de Darién con destino al norteño país.
En un Declaración Conjunta presentada a la prensa luego de una reunión trilateral en la cancillería, la ministra de Relaciones Exteriores del istmo, Janaina Tewaney, manifestó que las partes acordaron tres líneas de acción y un plazo de 60 dias, entre las que sobresale en enfrentamiento a las redes criminales que se enriquecen con el tránsito de los viajeros ilegales.
La diplomática enfatizó que será prioridad combatir las redes de tráfico y trata que promueven el movimiento ilícito de personas y bienes a través del Darién, lo cual pone en riesgo la vida de los migrantes y los expone a la explotación para obtener ganancias significativas.
Las delegaciones acordaron también abrir vías legales y flexibles para migrantes y refugiados que desestimulen el paso por la selva en la frontera con Colombia.
Incluso el propio secretario de Seguridad de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, anunció la instalación de controles en áreas remotas con el propósito de detectar la injerencia de redes criminales que operan en las rutas de los migrantes.
En la semana también la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados y la Organización Internacional para las Migraciones estimaron que más de 400 mil migrantes irregulares pudieran pasar por Panamá este 2023 rumbo a Estados Unidos.
De acuerdo con un comunicado entregado a la prensa solo en los primeros tres meses del año han cruzado la selva de Darién en la frontera con Colombia, más de 100 mil viajeros, seis veces más que en igual lapso de 2022.
La mayoría de los viajeros ilegales que atravesaron el Darién son de Venezuela, Haití y Ecuador, según las estadísticas del Servicio Nacional de Migración.
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