Se da por hecho que el Gobierno tiene los votos para imponer la iniciativa que el opositor Frente Amplio y la central sindical PIT-CNT, la agrupación de jubilados y movimientos sociales rechazan por inconsulta y lesiva, según sus argumentos.
El PIT-CNT a esta hora decide las formas que tendrá un paro de labores para mañana martes, fecha en que la Cámara Baja debe dar el visto bueno al proyecto legislativo.
Pero desde antes sindicatos afiliados a la central única de trabajadores decidieron parar labores por 24 horas en esa jornada, en la que no habrá servicio de transporte público, tampoco bancarios ni de salud, salvo emergencias en hospitales públicos.
El dirigente de la Unión Nacional de Obreros y Trabajadores del Transporte, Miguel Marrero, aseguró en entrevista televisiva que mañana “no va haber ningún servicio, ni urbano, suburbano, intedepartamental, internacional ni taxímetros”.
Los transportistas tienen prevista en esa jornada rodear el Palacio Legislativo con ómnibus desde la mañana.
Por su parte el sindicato de empleados bancarios anunció un paro también de 24 horas en todo el sector, tanto en la banca pública como privada.
Los sindicatos consideran que la reforma jubilatoria hará que los trabajadores labores durante más tiempo y recibirán menos retribuciones jubilatorias.
Por su parte el gobierno justifica que tomó en cuenta a todos los sectores y que el sistema de seguridad social necesita cambios para que sea sostenible financieramente.
mgt/ool