De acuerdo con el director del Instituto de Acueductos y Alcantarillados, Juan Ducruet, los valores históricos de inicio de lluvias y la recuperación del nivel operativo de lago Alajuela, para la producción normal de agua en la planta potabilizadora de Chilibre, pueden tardar hasta 45 días.
Ese nivel tan bajo del vital líquido en el embalse, según el funcionario, afecta la cantidad de agua cruda que entra a la planta potabilizadora y, por lo tanto, la que se puede procesar a diario.
En general, dijo, la producción de agua hacia la ciudad de Panamá se ve disminuida entre 20 y 30 millones de galones, de un total de 250 millones de galones diarios para unos dos millones de habitantes.
Respecto a la entrada de lluvias, opinó que los pronósticos marcan en fechas relativamente normales, pero se trata de la entrada del verano, las temperaturas y la evaporación del agua que ha habido este año.
Entre otros impactos de esta situación, la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) anunció el pasado miércoles 19 de abril que entró en vigencia un ajuste transitorio del nivel del calado para los barco neopanamax.
El administrador de la ACP, Ricaurte Vásquez, precisó que la ausencia de lluvias ha impactado la disponibilidad del recurso hídrico y que el Canal se ve obligado a hacer estas configuraciones. Sobre este tema, la directora del Instituto de Meteorología e Hidrología , Luz Graciela de Calzadilla, subrayó que la temporada lluviosa debería estar en todo el país en mayo, pero la atmósfera es muy dinámica y los pronósticos pueden cambiar.
“Para efecto de los lagos que suministran agua a las diferentes potabilizadoras, observamos que no hubo lluvias en diciembre de 2022. Luego se mete la temporada seca, dentro de la normalidad, pero se ha informado señales del fenómeno de El Niño [aumento de temperatura y menos lluvia]. Nosotros deberíamos tener lluvias generalizadas y no está siendo así”, indicó.
Por su parte, directivos del Ministerio de Desarrollo Agropecuario y productores de la occidental provincia de Chiriquí evaluaron recientemente recomendaciones, considerando el comportamiento climático para los próximos meses, cuando se inicia la época de lluvias y la siembra de los principales cultivos.
Aspectos como la temperatura, la humedad relativa, las radiaciones solares y la nubosidad, entre otros, serán monitoreados por especialistas para tomar las decisiones más acertadas, según informaron.
Ante el tema de la disminución de lluvias y sequías en otros países como Costa Rica, comenzó un programa de racionamiento del líquido, mientras que en Panamá evalúan un plan de contingencia que pasa por temas como racionamiento, optimización de la red y uso de aguas subterráneas.
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