La agresión tuvo lugar el sábado en la comunidad Uxiú, donde los aborígenes lesionados fueron rescatados por profesionales del Distrito Sanitario Especial Indígena Yanomami y llevados al centro de referencia en el poblado de Surucucu.
Uno de los nativos no resistió las heridas de bala y falleció antes de ser trasladado a un hospital en Boa Vista. La víctima era un agente de salud en Yanomami.
Ante los hechos, Guajajara anunció en la red social Twitter las medidas que adopta, como el envío de una comitiva interministerial para intensificar las acciones de remoción de los garimpeiros (mineros ilegales) de la región.
También pidió el refuerzo de las fuerzas federales y la investigación del caso por la Policía Federal. Al citar a Júnior Hekurari Yanomami, presidente del Consejo Distrital de Salud Indígena, el portal Brasil 247 asegura que los ilegales buscadores de metales preciosos presentes en la zona fueron responsables de los disparos contra los originarios.
Júnior se hizo conocido nacionalmente a inicios de año, al denunciar la grave crisis humanitaria que enfrenta el pueblo Yanomami, con la embestida de mineros y madereros contra el territorio nativo.
Homologada hace 31 años, la Tierra Indígena Yanomami abarca una extensa área de Roraima, además de una parte del estado de Amazonas, totalizando cerca de 9,6 millones de hectáreas, donde, según el Gobierno federal, viven más de 30,4 mil habitantes.
A partir de la segunda quincena de enero, la administración del presidente Luiz Inácio Lula da Silva implementó una serie de acciones para socorrer comunidades locales y retirar a los no indígenas de áreas exclusivas.
El anuncio de medidas afloró después de la difusión de imágenes de niños y adultos Yanomami desnutridos.
Según el Ministerio de Salud, en los últimos años, al menos 570 niños indígenas murieron por desnutrición y otras causas evitables. Además, solo en 2022 se confirmaron 11 mil 530 casos de malaria en la reserva.
Entre las disposiciones anunciadas por el Gobierno, figura la declaración de emergencia en salud pública de Importancia Nacional para combatir a la «falta de asistencia sanitaria» a los Yanomami.
Militares de las Fuerzas Armadas fueron movilizados para distribuir alimentos y brindar atención médica a los residentes de comunidades de difícil acceso.
La Aeronáutica pasó a restringir el acceso aéreo, buscando impedir la llegada de nuevos mineros y, principalmente, el abastecimiento de los que estaban ilegalmente en el área. Asimismo, las fuerzas de seguridad terrestres fueron reforzadas para sacar a los no indígenas de la reserva.
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