Tondelier mostró confianza en la materialización de tal escenario, que llevó el año pasado a ecologistas, insumisos, comunistas y socialistas a convertirse en la segunda fuerza en la Asamblea Nacional, detrás del oficialismo, mediante el bloque Nueva Unión Popular Ecológica y Social (Nupes).
Deberíamos en las próximas semanas poner en marcha una cooperativa de buenas voluntades, que representaría un comité de campaña para el 2027, declaró en entrevista con el semanario Le Journal du Dimanche.
En las presidenciales del año pasado, Emmanuel Macron logró la reelección derrotando nuevamente en el balotaje a la líder de la extrema derecha Marine Le Pen, comicios en los que el jefe de La Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon, quedó a las puertas de la segunda ronda, cita en las urnas en las que ecologistas, socialistas y comunistas tuvieron aspirante propio.
Para Tondelier, ya es momento de que en Francia la responsabilidad de liderar a la izquierda recaiga en una mujer, y pidió evitar que el debate en torno a la unidad se centre solo en Mélenchon.
La dirigente de EELV rechazó la idea de una elección primaria para escoger la candidatura unificada, al argumentar que esa vía ha fracasado.
A su juicio, el camino es la designación por acuerdo entre las diversas fuerzas de una persona con capacidad de “unir, calmar y dialogar”, capaz de representar en igualdad de condiciones a partidos, asociaciones, sindicatos, colectivos ciudadanos y artistas.
Respecto a los comicios para el Parlamento Europeo el año próximo, Tondelier pareció mucho menos convencida, al punto de sugerir que los ecologistas no apoyarán una lista común dentro de la izquierda, propuesta lanzada por los insumisos.
Según dijo, existen diferencias importantes en temas como China, Ucrania y la visión europea.
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