Cuando los legisladores debatían este lunes la forma en que serían analizadas ambas propuestas legales, la jefa de la fracción del gobernante Partido Progreso Social Democrático, Pilar Cisneros, afirmó que «aquí hay un pacto político compañeros».
Y, prosiguió, «el pacto político dice que vamos a tratar exactamente en igualdad de condiciones los dos proyectos de ley, en igualdad de condiciones, no uno primero y otro después, no uno con más sesiones y otro después».
Para algunos diputados, la iniciativa legal contra el crimen organizado debe tener prioridad pues de no ser sancionada antes del 7 de junio venidero, una decena de cabecillas de bandas delincuenciales saldrían en libertad al vencérseles las prisiones preventivas impuestas previas al juicio.
La reforma legal que ven los legisladores establece ampliar el tiempo de las presiones preventivas y para las investigaciones de los delitos.
De otro lado, el proyecto legal sobre las jornadas excepcionales 4×3 (cuatro días de 12 horas de labor y tres de descanso), de sumo interés para el Ejecutivo y rechazada de plano por sindicatos y partidos de izquierda, que la califican de explotadora y destructora de la conquista obrera de las jornadas de ocho horas.
Tras la afirmación de Cisneros, el diputado del Frente Amplio Ariel Robles refirió la necesidad de «hablar de pactos políticos y otros demonios en esta Asamblea Legislativa. Uno entiende bien de pactos políticos porque toda la vida los ha visto correr por el escenario político de nuestro país, uno los entiende muy bien».
No tenemos por qué coartar el debate, yo le pregunto directamente a las fracciones aquí quiénes están en ese pacto político, y si no hay tal pacto, qué es lo que está ocurriendo», cuestionó el diputado frenteamplista.
A ello, la legisladora del Partido Unidad Social Cristiana Daniela Rojas aseveró que no hay ningún pacto oculto, lo que hay es un acuerdo de cinco de las seis fracciones de esta Asamblea Legislativa.
De su lado, el diputado del Partido Liberación Nacional (PLN) Francisco Nicolás sostuvo que «no vine aquí a hacer pactos políticos y menos con la ley de los trabajadores, lo que hacen es operación embarre para repartir culpas, de lo mal que huele ese proyecto (jornadas 4×3).
El líder de la bancada del PLN, Óscar Izquierdo, insistió en negar la existencia de un pacto.
Pero para todos los analistas locales los legisladores del PLN (la mayor bancada de la oposición con 19 curules) aprobaron dar vía rápida a la discusión de la iniciativa sobre las jornadas excepcionales a cambio del respaldo de los diputados oficialistas al liberacionista Rodrigo Arias para que permaneciera un año más como presidente del Legislativo.
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