El Ministerio de Salud Pública (MSP) instó a embarazadas, lactantes y enfermos cardiovasculares a evitar beber el agua que entrega la estatal empresa Obras Sanitarias del Estado (OSE).
La exhortación siguió a la decisión de OSE de abastecer la ciudad desde fuentes más abajo del menguado río Santa Lucía por la persistente sequía, lo que elevó el grado de salinidad y cambió el sabor del vital líquido.
El MSP acotó que la medida será «acotada en el tiempo».
Mientras tanto, recomendó a personas con enfermedades renales crónicas, insuficiencia cardíaca, cirrosis y embarazadas “evitar en lo posible el consumo de agua de OSE”.
“En caso de tener que tomarla, se sugiere no exceder el litro de agua por día y aumentar la frecuencia de los controles de presión arterial”, indicó un comunicado ministerial.
Para la población en general, sin diagnóstico de hipertensión arterial, el MSP instó a mantener “el consumo habitual de agua diario, que puede ser en su totalidad agua de OSE”.
Además exhortó a no agregar sal a los alimentos para los niños lactantes hasta dos años.
En tanto, para la preparación de fórmulas de lactantes, sugiere utilizar agua mineral en caso de ser posible.
“En población con mayor riesgo de ser hipertenso no conocido (mayores de 60 años) se recomiendan los controles de presión arterial periódicos”, añade el comunicado.
Las personas que utilizan medicamentos antihipertensivos y diuréticos “podrán seguir consumiendo el agua de OSE hasta un litro por día, y completar su ingesta natural con agua mineral, concluye.
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