Así lo adelantó el presidente de la agrupación sindical, Marcelo Abdala, quien subrayó que el país encara una emergencia por el suministro y calidad del agua corriente, sobre todo en Montevideo y su Zona Metropolitana.
El vital líquido que entrega la administración de Obras Sanitarias del Estado (OSE) presenta elevados componentes de cloruros y sodios, pues se está tomando agua del Estuario del Río de la Plata, con mayores niveles de salinidad.
Abdala pidió soluciones estructurales y también para el corto plazo a la crisis hídrica. “Los sectores más carenciados son siempre los que tienen más dificultades para lidiar con estos problemas”.
Las autoridades sanitarias recomendaron el consumo de agua embotellada a embarazadas, bebés, hipertensos y personas con problemas renales y cardiovasculares.
A su vez, el ministro de Medio Ambiente, Robert Buvier, admitió que el agua que distribuye OSE es “bebible”, pero “no potable”.
Diversas instancias del Gobierno y la Intendencia de Montevideo iniciaron la distribución de bidones de agua para sectores vulnerables.
Por su parte, la dirección general de Educación Inicial y Primaria informó sobre la autorización de compra de agua mineral embotellada para las escuelas de los departamentos de Montevideo y Canelones, por un monto de 20 millones de pesos (unos 500 mil dólares).
La medida estará vigente por un mes en los comedores de 467 escuelas públicas de esos territorios donde estudian más de 76 mil niños.
La víspera un tribunal de lo Contencioso Administrativo aceptó un recurso legal contra el Estado uruguayo por los altos contenidos de sodio y cloruros del vital líquido.
Mientras tanto, el agua embotellada se convierte en producto codiciado en esta capital. La víspera estaba en falta en varios comercios en los que apenas quedaba la gasificada.
lam/ool