Durante la apertura anual de la Asamblea de la Organización Mundial de la Salud (OMS) este domingo, el titular reconoció el espíritu de cooperación y los logros de ese organismo, así como los riesgos que los afectan.
“La esperanza de vida en el mundo ha aumentado más del 50 por ciento; la mortalidad infantil ha descendido un 60 por ciento en 30 años; la viruela ha sido erradicada; y la poliomielitis está al borde de la extinción”, agregó al respecto.
Sin embargo, la guerra y los conflictos ponen en peligro a millones de personas y la salud de miles de millones está en riesgo por la crisis climática, alertó, al tiempo que convocó a la cooperación mundial para frenar estas amenazas.
“Podemos volver a la senda del progreso. Podemos hacer realidad nuestras ambiciones de salud y bienestar para todos. Pero sólo si el mundo trabaja unido. Si cooperamos, a pesar de las tensiones en las relaciones entre las naciones», insistió.
El titular llamó a promover la salud pública a largo plazo para reforzar la independencia, autoridad y financiación de la OMS, que se sitúa en el centro del esfuerzo internacional.
Dicho organismo debe tener un papel clave de coordinación en la lucha contra la próxima pandemia, agregó.
La cita de la OMS inició este domingo en Ginebra, Suiza, centrada en la conmemoración de los 75 años del organismo y el reconocimiento de los importantes progresos en la salud pública.
La Asamblea tiene como objetivos lograr que los estados garanticen una financiación más estable para cumplir con su labor y que apoyen un nuevo tratado internacional para que el mundo enfrente mejor futuras pandemias.
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