«No puedo dejar de mencionar el lamentable episodio en el que el jugador Vinicius Jr. fue víctima de insultos racistas. Brasil repudia, en los más fuertes términos, esos ataques», afirmó el canciller en la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de los Diputados.
El episodio racista ocurrió este domingo, cuando el joven atleta fue llamado mono por los aficionados del club Valencia, en el estadio de Mestalla.
Por los hechos, la cancillería se comunicó telefónicamente con la embajadora española en Brasilia, Mar Fernández-Palacios, para expresar el descontento del Gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
«Estamos siguiendo de cerca las primeras medidas tomadas por las autoridades españolas y las autoridades deportivas, cuyo objetivo es castigar a los perpetradores y, sobre todo, evitar la repetición de esos actos», remarcó el ministro.
Insistió en que «seguiremos atentos al caso y a la promoción de una política exterior antirracista».
Vieira aseguró que Brasil y España mantienen un contacto permanente para hallar fórmulas que pongan punto final al racismo en el fútbol y otros deportes.
Reveló que en los últimos días conversó telefónicamente sobre el delicado asunto con su homólogo español, José Manuel Albares, quien manifestó la decisión del Gobierno de Pedro Sánchez de evitar que esos sucesos se repitan e impedir que queden impunes.
«El ministro Albares manifestó su pleno repudio», subrayó el jefe de la diplomacia brasileña, convencido de que lo ocurrido en Mestalla no refleja las características de la sociedad española.
La prensa nacional asegura que el Real Madrid mostró su más enérgica repulsa y presentó una denuncia ante la Fiscalía General del Estado español por los insultos racistas contra Vinicius Jr.
En un comunicado, la sociedad deportiva apuntó que «estos hechos constituyen un ataque directo al modelo de convivencia de nuestro Estado social y democrático de derecho» y tales agresiones «constituyen además un delito de odio».
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