De acuerdo con la revista científica Nature Chemical Biology, el resultado fue un potente antibiótico experimental llamado abaucina, que será sometido a nuevas pruebas antes de ser usado como tratamiento.
El doctor Jonathan Stokes, investigador de la Universidad McMaster de Canadá, calificó a la bacteria estudiada, Acinetobacter baumannii, como el enemigo público número uno, ya que es realmente común encontrar casos en los que es resistente a casi todos los antibióticos.
La investigación descrita precisó que la IA tiene el poder de acelerar enormemente el descubrimiento de nuevos fármacos, entre ellos los antibióticos que matan a las bacterias, pero estas se han vuelto cada vez más difíciles de tratar, debido a que desarrollan resistencia a los medicamentos existentes.
Cálculos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) estiman que más de un millón de personas al año mueren a causa de infecciones provocadas por agentes que se resisten al tratamiento con antibióticos.
Los investigadores se centraron en una de las especies de bacterias más problemáticas que puede infectar heridas y causar pulmonía, y aunque no se habla mucho de ella, se trata de una de las tres superbacterias que la OMS identifica como una amenaza crítica.
A menudo es capaz de ignorar múltiples antibióticos y causar problemas en hospitales y residencias de ancianos, donde puede sobrevivir en superficies y equipos médicos.
El siguiente paso con el antibiótico abaucina es perfeccionarlo en laboratorio y realizar ensayos clínicos, aunque los primeros experimentos arrojaron que puede tratar heridas infectadas en ratones y matar muestras de A. baumannii en pacientes.
No obstante, los autores del descubrimiento advirtieron que para que los primeros antibióticos descubiertos con la ayuda de IA puedan ser recetados quizás habrá que esperar hasta 2030.
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