La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), el Ministerio de Salud y la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS) en esta nación centroamericana dieron a conocer que la distribución de las vacunas comenzará por las zonas más remotas del país hasta llegar a la Gran Área Metropolitana. La Comisión Nacional de Vacunación y Epidemiología definió además como grupo de riesgo a la población entre siete y 57 años con presencia de alguna enfermedad crónica (diabetes, cardiopatías, obesidad grado I, II, III o mórbida, enfermos respiratorios crónicos (asma-EPOC- bronquitis crónica o tuberculosis).
A estos se suman aquellos con síndrome de Down, enfermos renales, parálisis cerebral infantil (PCI), desnutrición severa y moderada, cáncer, e inmunodeficiencias primarias, secundarias o adquiridas y vasculitis. También trabajadores del sector salud de la CCSS y el Ministerio de Salud, Cruz Roja, Bomberos y cuerpos policiales, así como trabajadores del 9-1-1, migración y extranjería.
Completa la lista de priorizados los estudiantes de ciencias de la salud y técnicos afines que están realizando campos clínicos dentro de los establecimientos de salud de la CCSS.
Enfermedad altamente infecciosa que se presenta de forma estacional y con elevadas tasas de contagio, este tipo de influenza incrementa las consultas ambulatorias en los servicios sanitarios y hospitalizaciones, por lo que es considerado un problema de salud pública.
Para la jornada 2023 la institución adquirió un millón 500 mil dosis de este fármaco. Las personas incluidas en los grupos de riesgos podrán vacunarse en cualquier establecimiento de salud de la CCSS, siempre y cuando haya disponibilidad del medicamento.
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