El ministerio de Seguridad indicó a través de un comunicado que, como parte de un incentivo, afrece a las personas que contribuyan a la detención de los considerados terroristas importantes sumas monetarias, las cuales oscilan entre 150 mil y 275 mil euros.
Con el objetivo de que puedan identificarse a los buscados, ese ente, en coordinación con la policía, difundió en medios informativos locales fotos de los planificadores o participantes en actos terroristas.
Entre los radicalizados con ordenes de captura se encuentran los burkinabeses Sibidé Dramane y Diallo Moussa, de 45 y 40 años, respectivamente; así como el maliense Amdaou Koufa, uno de los cabecillas del Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes, afiliado a la red Al-Qaeda.
Burkina Faso sufrió en lo que va de esta semana una oleada de ataques violentos por grupos extremistas en diversas zonas, que dejaron saldo de 21 muertos, entre ellos 14 milicianos progubernamentales, señalaron fuentes de seguridad.
Dentro este país, donde gobierna una junta militar y que el pasado año sufrió dos golpes de estado, desde 2015 hasta la fecha perecieron de forma violenta más de 10 mil personas, entre ellas soldados y policías, en tanto alrededor de dos millones resultaron desplazados, según organizaciones humanitarias.
La población de Burkina Faso sufre condiciones de inseguridad a raíz de los asaltos de formaciones extremistas, como el Estado Islámico en el Gran Sahara y el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes.
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