Según el informe, gran parte del incremento de excursionistas reportado se debe a una mayor llegada de pasajeros de cruceros, un total de 188 mil 114 personas.
Para la institución pública, el resultado es positivo para la industria del ocio, que continúa buscando un punto de equilibrio después de la debacle provocada por las restricciones de movilidad aplicadas durante la Covid-19 desde el 2021.
Acerca del número de turistas que permanecen más de 24 horas en un destino, la ATP contabilizó 521 mil 107, un auge de 57 por ciento contra el movimiento del pasado año.
Mientras, el número de viajeros que ingresan al istmo pero permanecen menos de 24 horas cerró el primer trimestre de este año con un alza de 14 por ciento (77 mil 633 personas).
También de enero a marzo últimos creció la ocupación hotelera en 61 por ciento en relación con similar periodo de 2022, añade el estudio.
Para el presidente de la Cámara Nacional de Turismo de Panamá (Camtur), Ovidio Díaz, el comportamiento es bueno, aunque adelantó que será “drástica” la diferencia cuando se conozcan los números del segundo trimestre.
Históricamente, la temporada alta del turismo panameño termina en marzo o comienzo de abril, y luego se reporta una merma en el flujo de viajeros al iniciar las lluvias en el país, indicó.
El titular de la ATP, Iván Eskildsen, ha dicho a la prensa que esperan continuar mejorando la tendencia para el 2023, con el objetivo de alcanzar entre 2,2 y 2,4 millones de visitantes.
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