Este individuo, dueño del Grupo México y entre los 15 más ricos del mundo, acusado hace años de ser quien más daño ecológico haya causado en México con sus numerosas minas, y en Perú con la Southern, sigue impunemente su actuación y es el único que durante 16 años consecutivos ha frenado la solución de una huelga obrera.
Es el hombre que se negó a rescatar 63 cadáveres de una mina de carbón que colapsó en Pasta de Conchos en febrero de 2006 y no se responsabilizó de las indemnizaciones a familiares a pesar de las pruebas de que elo ocurrió por las pésimas condiciones de seguridad en que mantenía el yacimiento.
El también senador Gómez Urrutia explicó que, en el marco del Mecanismo de Respuesta Rápida del T-MEC, Estados Unidos, como socio del acuerdo trilateral, solicitó revisar la situación de los trabajadores de la mina San Martín, ubicada en Sombrerete, Zacatecas, propiedad de Larrea, quien ha violado de forma impune su derecho a huelga y la libre asociación.
Comentó que finalmente se abre una puerta para resolver la huelga que desde hace 16 años mantienen los trabajadores, aunque “la justicia vendrá de fuera, porque los gobiernos de Fox, Calderón y Peña Nieto estuvieron del lado de la empresa y aunque el presidente Andrés Manuel López Obrador siempre se ha caracterizado por respetar los derechos gremiales, la Secretaría del Trabajo poco hizo”.
El dirigente nacional del sindicato minero resaltó que hasta ayer por la tarde, luego de que Washington pidió a México revisar el caso Sombrerete, la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje les notificó un laudo en el que declaran que Grupo México es el responsable de la huelga y que está obligado a cumplir con el pago de salarios caídos, prestaciones y a recontratarlos en caso de que reabra.
Gómez Urrutia resaltó que de todas formas Larrea deberá cumplir con las demandas de los trabajadores de San Martín, tal como lo solicita el gobierno de Estados Unidos .
De hecho “es una condena a Larrea y una petición al gobierno mexicano de que resuelva la situación de los mineros, ya que en 16 años han padecido todo tipo de tropelías, entre ellas ser desalojados por la fuerza pública y sustituidos por esquiroles que durante un buen tiempo hicieron producir la mina.
“Confiamos en que el gobierno mexicano atenderá oportunamente esta solicitud para que finalmente Germán Larrea se someta a las leyes y deje de pisotear los derechos de los trabajadores.”
En tanto, el representante legal del sindicato minero, Nahir Velasco, resaltó que gracias al acompañamiento de United Steelworkers, se planteó la queja ante las autoridades laborales de los países miembros del TMEC, quienes la admitieron y ayer resolvieron a través de su panel de expertos “pedir cuentas” al poderoso dueño de Grupo México, quien ya no podrá seguir evadiendo la justicia.
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