En declaraciones a la red estadounidense para Medio Oriente, Washington Institute, Geagea aseguró estar haciendo todo lo necesario para evitar la llegada a la Presidencia de la nominación de Suleiman Franjieh y ofrecer alternativas.
De acuerdo con el político, lo importante es eliminar a la Resistencia islámica libanesa del interior del Estado y, en ese sentido, indicó que tomará medidas graduales.
Con un paso de criminalidad durante la guerra civil (1975-1990), Geagea manifestó que en su condición de libanés constituye un deber enfrentar la amenaza de Hizbulah y para ello cuentan con el apoyo de Estados Unidos.
La semana pasada el Parlamento de Líbano fracasó por duodécima ocasión en su intento de elegir al sucesor de Michel Aoun, quien concluyó su mandato el 31 de octubre.
En la sesión legislativa del día 14, el exfuncionario del Fondo Monetario Internacional Jihad Azour obtuvo 59 votos y Franjieh recibió 51, para ratificarse como las principales opciones de la comunidad cristiana maronita en ocupar la jefatura del Estado.
Hasta el momento, el dúo chiita de Hizbulah y el Movimiento Amal junto a una gran proporción de diputados sunitas e independientes respaldan la elección de Franjieh, avalado por sus posiciones nacionales y la apertura al diálogo local, árabe e internacional.
En tanto, Azour, considerado el candidato de la oposición, es la propuesta de la Corriente Patriótica Libre, el Kataeb, las Fuerzas Libanesas y el Partido Socialista Progresista.
Bajo un gobierno interino de limitados poderes constitucionales y en medio de la peor crisis económica de su época moderna, Líbano intenta designar al presidente número 14 después de la independencia.
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