Una noticia recibida hoy con entusiasmo por el Gobierno de izquierdas que encabeza el socialista Pedro Sánchez, y que llega justo después de que participara en el popular programa El Hormiguero, lo mismo que su rival, el conservador líder del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo.
La presencia de Sánchez, también días atrás en El Intermedio, un programa satírico con dosis de humor político que conduce el Gran Wyoming, siguió a la de Feijóo en El Hormiguero que dirige Pablo Motos.
En los dos casos, la idea fue mostrar a los principales candidatos en las elecciones generales del 23 de julio, de momento con el PP, según las encuestas, con aspiraciones de reconquistar el Palacio de la Moncloa.
Luego de unos días complejos y llenos de críticas, Sánchez y su equipo en el Ejecutivo comenzaron a remontar los criterios desfavorables con datos como el de este jueves de la inflación y el reconocimiento de Feijóo de que la reforma laboral vigente e impulsada por el Gobierno actual es buena.
La ralentización del alza del precio de los carburantes, la electricidad y los alimentos, según datos ofrecidos de forma provisional publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), son los elementos fundamentales que permitieron reducir la inflación.
Definitivamente las cifras oficiales se conocerán mañana, pero a todas luces la esbozada de 1,9 es 1,3 puntos menor a la de mayo (3,2 por ciento) y 2,2 unidades inferior a la de abril (4,1).
Los guarismos no pueden ser mejores, cumplen con los objetivos del Banco Central Europeo (BCE) del dos por ciento y consolida la idea de que la economía española regresa a sus estadísticas más sólidas antes de la pandemia.
Asimismo, se distancia considerablemente del momento más álgido el pasado año, en julio de 2022, cuando llegó al 10,8 por ciento de inflación. En relación con sus vecinos de la zona euro, es líder ya que el resto logró 6,1 por ciento interanual en mayo, según Eurostat.
En Bruselas, donde realizada una visita de trabajo, el presidente Sánchez se congratuló de estos resultados y subrayó que el 23 de julio (fecha de las elecciones), no debería desmontarse lo que funciona en España.
mem/ft