En el primer corte de la fiscalización de la Cuenta Pública 2022, correspondiente al cuarto año de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, la ASF detectó diversas anomalías y los resultados de 86 auditorías los entregó a la Comisión de Vigilancia de la Cámara de Diputados.
El informe indica que de las irregularidades, ya se han recuperado 10 millones 174 mil pesos (571 mil dólares) y quedan pendientes por aclarar 61 millones 547 mil pesos (poco más de tres millones de dólares).
La mayor parte de los recursos cuyo destino debe ser aclarado por las entidades auditadas, corresponde al sector de infraestructura, comunicaciones y transportes.
En tanto, en el sector de Hacienda y Crédito Público y en Educación Pública, están pendientes de aclarar alrededor de un millón de dólares entre ambos.
De esas 86 auditorías, 77 corresponden al gasto federalizado ejercido por gobiernos estatales y el resto al ejercicio presupuestal de instancias federales.
Ninguna de esas inspecciones incluidas en este paquete corresponde a los proyectos insignia del gobierno federal ni al fraude operado en Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex), aclara el informe y no parecen tener un perfil de corrupción.
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