En un discurso con motivo del 22 aniversario de la fundación de la organización, el líder político convocó a un enfoque directo para discutir los temas pendientes en el país, lejos del desafío, la contradicción y la malicia.
Arslan subrayó que el escenario de hoy es delicado y sensible, pues Líbano vive en un vacío casi total desde una vacancia en la presidencia hasta un retroceso en la legislación y el trabajo de las instituciones constitucionales.
Sobre este tema, respaldó la elección de un mandatario capaz de comunicarse con todos los partidos y formar un gobierno que asuma responsabilidades en la aprobación de las reformas requeridas y su implementación; así como en la reconstrucción de la confianza entre el Estado y el pueblo.
El dirigente saludó la firmeza de los residentes del Golán sirio ocupado y del pueblo palestino en su lucha contra la entidad israelí que solo conoce de asesinatos, destrucción y arrogancia.
Con respecto al expediente de los desplazados sirios en suelo libanés, el titular del PDL rechazó la injerencia internacional y el uso del derecho al retorno como una carta para presionar al liderazgo de Damasco.
En este sentido, reclamó tratar el archivo mediante el diálogo entre ambas naciones y esclarecer la confusión interna para un regreso de los refugiados sirios seguro y voluntario con el propósito de aliviar la carga sobre el Estado libanés.
A propósito, indicó que la apertura árabe a Siria es una clara evidencia del futuro próspero y brillante para su pueblo; además de incidir en la estabilidad de la región con la contribución de todos.
En medio de discrepancias y la agudización de la crisis, el Parlamento de Líbano intenta elegir al presidente de la República número 14 después de la independencia, luego del fin del mandato de Michel Aoun el 31 de octubre.
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