Según las fuentes, los militares emplearon la artillería pesada y los lanzacohetes en el ataque contra bastiones extremistas en el oeste de la provincia de Alepo, a unos 400 kilómetros al norte de esta capital.
Asimismo, los regulares atacaron con artillería y cohetes las sedes de los terroristas en las localidades de Sarmaniyah, Qastal al-Burj y al-Ankawi.
También fueron atacadas las posiciones de los radicales en Al-Fatira, Fleifel, Sufohen, Kansafra y Al-Bara, en la septentrional provincia de Idlib.
De acuerdo con oficiales de operaciones, los ataques fueron en respuesta a las violaciones de los terroristas al alto el fuego en la zona de desescalada y al ataque perpetrado la víspera contra la localidad de Jourin, el cual causó la muerte de un soldado. Los extremistas incrementaron en los últimos meses sus acciones desde Idlib contra zonas residenciales ubicadas bajo control del Gobierno, lo cual lleva al ejército nacional a responder a las fuentes del fuego de los radicales que retienen a cientos de miles de civiles como escudos humanos.
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