De acuerdo con el documento, citado por el portal G1, también hay 10 millones de personas desnutridas en el gigante sudamericano.
La ONU revela que en el mundo son 735 millones de personas pasando hambre y 2,3 mil millones en situación de inseguridad alimentaria.
En este país, 1,5 millones de personas pasaron a formar parte de esa realidad.
La inseguridad alimentaria moderada es cuando las personas enfrentan incertidumbres sobre su capacidad de obtener alimentos y son forzadas a reducir la calidad y/o la cantidad de alimentos que consumen debido a la falta de dinero u otros recursos.
Una incertidumbre alimentaria grave ocurre cuando, en algún momento, las personas se quedan sin comida, pasan hambre y, en el caso más extremo, se quedan sin comestible por un día o más.
Los datos proceden del informe sobre el estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo, publicado conjuntamente por cinco agencias especializadas de la ONU.
Se menciona en este caso a la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, la Organización Mundial de la Salud y el Programa Mundial de Alimentos.
El promedio de los últimos tres años (2020-2022) es que 1,5 millones de brasileños entraron para las estadísticas del hambre, en comparación con el trienio 2019-2021. En total, son 10,1 millones, lo cual representa el 4,7 por ciento de la población.
La misión del gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva es asegurar que podamos sacar a Brasil del Mapa del Hambre, aunque sea uno de los mayores productores de alimentos del mundo, afirmó al respecto Wellington Días, ministro de Desarrollo Social.
Aseguró que «todos los ministerios trabajan integrados con los estados, municipios y entidades para garantizar esto. Pronto se lanzará el Plan Brasil Sin Hambre, con el objetivo de reducir la pobreza y la extrema pobreza», adelantó.
Según Dias, 18,5 millones de familias, siendo 43,5 millones de brasileños, ya elevaron la renta en 2023 con el nuevo Bolsa Familia, programa de ayuda para los núcleos más necesitados.
En marzo, Lula relanzó en Recife, capital del estado de Pernambuco (nordeste), el Programa de Adquisición de Alimento, creado en 2003 en el ámbito del plan Hambre Cero.
Tal iniciativa afloró durante su primer mandato para contribuir a garantizar la seguridad alimentaria y nutricional de la población brasileña, además de fortalecer la producción de alimentos de la agricultura familiar.
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