El 22 de octubre de ese año, el policía Juan Felipe González disparó a quemarropa desde un vehículo blindado hacia el rostro del joven de 23 años que protestaba en la plaza Dagoberto Godoy de esa ciudad.
Como resultado de la agresión, la víctima recibió heridas en la cara y el hombro y perdió gran parte de la visión de su ojo izquierdo.
Unas 460 personas en todo el país sufrieron daños oculares durante la represión de los carabineros y las fuerzas armadas a las protestas iniciadas en Chile el 18 de octubre de 2019 contra el modelo neoliberal.
Si bien la mayoría de los responsables están en la impunidad, en Santiago, la capital, ya se tramitaron algunos casos, entre ellos el de la actual senadora Fabiola Campillai, quien perdió la vista y el olfato producto de la explosión de una bomba lacrimógena en su rostro.
El juicio en La Araucanía se prolongará por al menos tres días. La Fiscalía pide 12 años de privación de libertad para el policía Juan Felipe González, mientras la parte querellante y el Instituto Nacional de Derechos Humanos solicitan 15 años.
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