En ese periodo analizado fueron registrados mil nueve casos este año y 323 en el 2022.
Un informe circulado por la entidad sanitaria precisa que el total de casos reportados este año hasta la fecha, 838 corresponden a hepatitis A, la cual es la más común entre los costarricenses.
Mientras, la hepatitis B registra un total de 101 casos. Asimismo, se contabilizan un total de 70 casos de hepatitis sin clasificar.
Considera el ministerio importante indicar que el aumento de casos de hepatitis A podría deberse a la falta del uso de medidas higiénicas como lavado frecuente de manos con agua y jabón, protocolo de tos y estornudo, una adecuada manipulación de alimentos, así como la ingesta de comida en puestos ambulantes o de dudosa procedencia.
Por su parte, la hepatitis B está relacionada al contacto con sangre infectada o contacto sexual no protegido, incluyendo el oral, por recepción de productos contaminados a través de transfusiones, trasplantes de órganos, procedimientos invasivos (inyección o tatuaje con agujas reutilizadas), y de madre a hijo recién nacido.
La hepatitis es una enfermedad inflamatoria que afecta el hígado, dentro de las causas se reportan infecciones virales, bacterianas, inmunitarias o tóxicas.
Los síntomas típicos
son coloración amarillenta de la piel y los ojos, orina oscura, fatiga extrema, náuseas, vómitos y dolor abdominal. La infección crónica puede conducir a cirrosis, falla hepática o cáncer de hígado.
En ocasión del Día Mundial contra la hepatitis desde el ministerio de Salud se hace un llamado a la población a no descuidar las medidas sanitarias, así como evitar el contacto con personas con síntomas compatibles con esta enfermedad.
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