Dicha entidad divulgó el trabajo de los investigadores de la Universidad Estatal de San Diego, Estados Unidos, que resaltan la capacidad antioxidante de la fresa, que ya se conoce que trae ventajas cardiovasculares y metabólicas.
Precisan los científicos que los participantes consumieron un polvo de fresa equivalente a dos raciones diarias de la fruta durante ocho semanas.
Comprobaron que “ la velocidad de procesamiento cognitivo aumentó un 5,2 por ciento, la presión arterial sistólica disminuyó un 3,6 por ciento y la capacidad antioxidante total aumentó significativamente un 10,2 por ciento”.
El perímetro de la cintura disminuyó un 1,1 por ciento, preciaron los expertos.
La fresa ayuda a reducir el colesterol y disminuye la presión arterial. Dicha fruta posee pelargonidina, una sustancia bioquímica asociada con un menor riesgo de demencia por la enfermedad de Alzheimer.
Es una fuente de muchos compuestos bioactivos, proporciona la vitamina C que necesita diariamente el ser humano y contiene nutrientes cardiosaludables como folato, potasio, fibra, fitoesteroles y polifenoles.
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