El informe, publicado este jueves en el sitio digital del diario Il Gazettino, refiere en tal sentido un sensible aumento de la adicción a la cocaína en las ciudades de Venecia y Pescara, en el norte y centro del país, respectivamente, mientras creció el uso de ketamina en las septentrionales urbes de Milán, Bolonia y Florencia.
Entre las localidades con mayor consumo per cápita de marihuana se encuentran Nuoro y Cagliari, en la isla de Cerdeña, así como y Trieste, en la región de Friuli-Venecia Julia, a la vez que en Roma se elevó en los últimos años la adicción a la metanfetamina, y en Florencia es alto el empleo de la heroína, señala el documento.
Sara Castiglioni, jefa del laboratorio de Indicadores Epidemiológicos Ambientales del referido instituto, expuso al dar a conocer esta investigación, que entre noviembre de 2020 hasta abril de 2022 se realizaron cuatro sondeos de los residuos metabólicos de sustancias estupefacientes en las aguas urbanas que llegan a las depuradoras.
De esta manera, según dijo, “fue posible estimar qué y cuántas sustancias consume el conjunto de la población”.
El estudio mostró que el empleo de cannabis superó las 100 dosis diarias por cada mil habitantes en Nuoro, Bolonia, Fidenza, Cagliari, Trento y Trieste, mientras que los valores más altos de cocaína se observaron en Pescara, Montichiari, Venecia, Fidenza, Roma, Bolonia y Merano, con unas 20 dosis diarias por cada mil residentes.
La ketamina, droga anestésica que actúa sobre el sistema nervioso central como un potente psicodélico, se encuentra en casi todas las ciudades analizadas con una media de 5 miligramos por día por cada mil habitantes y consumos superiores a la media en algunas capitales como Bolonia, Cagliari, Florencia, Milán, Turín y Venecia.
Por otra parte, el consumo medio de metanfetamina, estimulante del sistema nervioso central, es constante, con un promedio de 0,13 dosis diarias por cada mil residentes, pero con valores superiores en Roma, donde se llegó a las 0,79 dosis, agregó la fuente.
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