Un informe elaborado por la firma consultora The European House-Ambrosetti, publicado este sábado en el sitio digital del diario Il Sole 24 Ore, señala que entre los años 2015 y 2022 la capacidad fotovoltaica solo aumentó un 33,0 por ciento en este país, en tanto que en España el avance fue de 287,0 puntos porcentuales.
También Francia y Alemania registraron cifras muy superiores a las italianas, con desarrollos del 144,0 y el 70,0 por ciento, respectivamente, apunta el análisis.
Por otra parte, de acuerdo con esa investigación, igual situación se presentó en relación con la energía eólica, con un incremento del 29,0 por ciento en la capacidad instalada por esta nación durante ese período, muy por debajo de Francia, Alemania y España, con incrementos respectivos de 105,0; 49,0 y del 28,0 puntos porcentuales.
En criterio de los especialistas “la concesión de permisos en Italia representa sin duda un factor enormemente crítico para el proceso de desarrollo de las fuentes renovables. La transición es un hecho extraordinario y excepcional y debe encontrar una correspondencia normativa con ese carácter extraordinario, que hoy no tenemos”.
Aunque en 2022 Italia instaló 3,1 gigavatios (GW) de capacidad renovable, lo cual significó un salto en comparación con los 1,1 GW en el período 2015-2021, será imposible al actual paso que este país alcance el objetivo para 2030, de 80 GW, previsto en su Plan Nacional Integrado para la Energía y el Clima (Pniec), agrega la fuente.
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