Protección Civil exhortó a la población a que tome medidas preventivas para disminuir los daños sobre las personas, en especial adultos mayores y niños, y animales, que pueda acarrear la canícula.
Luego de una primera semana de junio con temperaturas atípicamente bajas, la Unidad Estatal de Protección Civil en Sonora dijo que el pronóstico oficial del tiempo indica calor abrasador.
La última semana de mayo y la primera de junio, las temperaturas en Hermosillo, Ciudad Obregón, Navojoa y Guaymas, promediaron los 35 grados Celsius con mañanas y noches frescas de entre 15 a 20 grados.
Mientras que en el desierto entre Sonora y Arizona, una de las regiones más calientes del mundo, la temperatura apenas alcanzó los 37 grados, algo totalmente inusual en la temporada de estiaje, que son los días más secos, previo al inicio de la temporada de lluvias.
Armando Castañeda Sánchez, director general y encargado de despacho de Protección Civil Sonora, indicó que la población debe aumentar la ingesta de agua, vestir con colores claros y evitar la exposición a los rayos del sol por tiempos prolongados.
Explicó que la presencia de un sistema anticiclónico en niveles medios de la atmósfera mantendrá los efectos de la tercera onda de calor sobre el territorio nacional.
En el caso de Hermosillo esperan desde ete lunes temperaturas máximas de 44 o más grados; es decir, calor extremo, fenómeno que también se espera en las principales ciudades del estado.
Para la región central del estado, a partir de mañana martes se anticipan temperaturas de 44 a 48 grados como máximo; en la región sur de 44 a 47 grados; mientras que en la zona norte las máximas estarían entre los 38 a 40 grados.
En la zona de la sierra alta se esperan máximas de 34 a 37 grados, en la sierra baja, de 43 a 47, en el río Sonora, de 42 a 45, y en el noroeste valores de 43 a 47.
Recordó que la alta velocidad de los vientos en el estado, las temperaturas extremas y la baja humedad presente en la región van a seguir favoreciendo la generación de incendios forestales, por lo que se requiere el apoyo de la población para evitar tirar colillas de cigarros, pilas o envases de vidrio, que puedan generar el inicio de un fuego en el monte.
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