Las amenazas a la seguridad de las fuerzas de paz de la ONU y los daños a su propiedad son inaceptables y pueden constituir delitos graves según el derecho internacional, señaló el alto representante en un comunicado divulgado aquí.
El incidente, que provocó lesiones en el personal y daños a los vehículos de las Naciones Unidas, tuvo lugar dentro de la zona de amortiguamiento cerca de Pyla/Pile cuando los equipos de ONU impedían trabajos de construcción no autorizados en la zona de conformidad con su mandato, detalla el texto.
Guterres instó a la parte turcochipriota a respetar la autoridad de los representantes de Naciones Unidas acorde con lo dispuesto por el Consejo de Seguridad y a retirar todo el personal y la maquinaria de la zona de amortiguamiento de la ONU de inmediato.
Además, pidió ratificar el compromiso para encontrar una forma de avanzar mutuamente aceptable en la zona de Pyla/Pile.
Por último, convocó a las partes para que se abstengan de tomar medidas unilaterales que puedan aumentar las tensiones y comprometer la búsqueda de una salida pacífica.
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