De acuerdo con la cuenta de Twitter de la Presidencia de la RDC, las conversaciones giraron en torno a la dinámica vinculada al Movimiento 23 de marzo (conocido como M23), uno de los principales grupos insurgentes que mantienen enfrentamientos armados en esa región congoleña.
Además, abordaron la situación en el Gran Kivu Norte y en Ituri, sobre la actuación de la fuerza de la Comunidad Africana Oriental y acerca del despliegue de la misión de la Comunidad para el Desarrollo del África Austral (SADC).
Bintou Keita también señaló que uno de los puntos del encuentro fue la organización de la salida, “de forma digna”, de la Misión de las Naciones Unidas para la estabilización en la RDC (Monusco).
La situación en el país es compleja debido a las acciones de diversos grupos armados y las afectaciones a la población civil.
La pasada semana unas 25 personas murieron en la zona de Samboko, provincia de Ituri, en ataques realizados por integrantes de las denominadas Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF), leales al Estado Islámico.
El Ejército congoleño junto a fuerzas de la Monusco realizan desde hace varias semanas una operación conjunta en esa región y en Kivu Norte, donde refuerzan las medidas de seguridad.
Naciones Unidas evaluó recientemente como desastrosa la situación humanitaria existente en el este de la RDC, donde operan varios grupos armados irregulares.
En tanto, la Organización Internacional para las Migraciones cuantificó hasta mediados de julio de 2023 unos 6,1 millones de desplazados por el conflicto, la mayor población de África que ha dejado sus hogares debido a esa causa.
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