La cifra se corrige con la inflación del año anterior, sobre la base del Índice Nacional de Precios al Consumo, sumado a la variación positiva del Producto Interno Bruto de hace dos calendarios.
Esta es una de las promesas de campaña de Lula, contrario a lo ocurrido en el Gobierno de Jair Bolsonaro (2019-2022), que estuvo cuatro años sin la valoración.
Además del alza en esa paga, el texto final también incluyó la actualización de la tabla del Impuesto sobre la Renta, que pasó a tener exención para quien gana hasta dos mil 640 reales (alrededor de 540 dólares).
La prerrogativa estaba congelada en mil 903,98 reales (390 dólares) desde 2015.
Además, el exsindicalista envió al Congreso la medida provisional para cobrar, dos veces al año, entre 15 y 20 por ciento de los rendimientos de los fondos de los súper ricos.
De igual manera firmó y remitió al Parlamento el proyecto de ley para gravar las aplicaciones de brasileños en el exterior en paraísos fiscales, conocidos como offshores y trusts.
Actualmente, esa tributación ocurre solo cuando el dinero es rescatado y enviado a Brasil.
El Senado aprobó el 24 de agosto la medida provisional del nuevo sueldo mínimo. El ponente Jaques Wagner, líder del gobierno en esa instancia legislativa, mantuvo el mismo texto que fue aceptado anteriormente en la Cámara de Diputados.
Una orden temporal tiene fuerza inmediata de ley cuando es firmada por el presidente del país, pero necesita ser aprobada por el Congreso en hasta 120 días para no perder su validez.
Congresistas criticaron en la sesión el plazo apretado para su aprobación, que caducaría este 28 de agosto y defendieron que el Senado tenga mayor rigidez al pedir que se analice con mayor rapidez.
El relator, diputado Merlong Solano, incluyó en el contenido la valoración permanente del salario mínimo, en los moldes del modelo adoptado entre 2007 y 2019.
La ceremonia de certificación de tuvo lugar en el Palacio de Planalto, sede del Poder Ejecutivo en Brasilia, un día después que el mandatario regresara de un viaje de siete días a África. En el acto estuvo acompañado por el titular de la Cámara baja, Arthur Lira.
Para Lula, acrecentar esa mensualidad mínima resulta un compromiso con el pueblo brasileño, al tener en cuenta las nuevas formas del mercado y la invariable transformación en las dinámicas de trabajo.
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