«No podemos conformarnos con nuestra excesiva dependencia de los ingresos por exportación de crudo», afirmó el mandatario durante la reunión con el Consejo Económico y Social, órgano consultivo del presidente de la República.
Añadió que el país precisa incrementar la gama de productos de exportación, preferentemente manufacturados, con valor añadido, para vender a mejor precio y garantizar el empleo local, especialmente para los jóvenes.
Lourenço consideró que el Ejecutivo ha hecho todo lo posible, en términos de políticas, para crear un buen ambiente empresarial, atraer la inversión extranjera directa, y animar a los bancos y al sector empresarial privado, sin embargo, los resultados siguen siendo tímidos.
«Necesitamos más audacia, que los empresarios acepten el riesgo inherente a cualquier negocio», dijo el jefe de Estado ante el órgano, integrado por expertos en los campos de las ciencias económicas y sociales, así como empresarios y gerentes que cumplen un mandato de dos años.
Señaló que la nación está enfrascada en el apoyo a la agricultura familiar, cuyos resultados se reflejan en gran parte de los renglones de consumo nacional, y agregó que igualmente se abrieron líneas de financiación para promover la producción de cereales, carne, pescado y otros productos del mar.
«El país está haciendo un gran esfuerzo para aumentar el suministro de agua y energía para la población, pero también para las empresas», aseguró el gobernante y comentó planes de invertir en la construcción de miles de kilómetros de líneas para transportar energía de presas hidroeléctricas.
El presidente insistió en que Angola tiene que ser un destino turístico importante en los próximos años, un objetivo por el cual deben unir fuerzas todos los actores.
Criticó a quienes intentan desalentar a las instituciones financieras internacionales, acreedores e inversores interesados en el desarrollo del país, y consideró tal actitud como falta de patriotismo y sabotaje a los intereses nacionales.
También Lourenço refirió que ante la devaluación del kwanza frente al dólar, el Ejecutivo aborda la cuestión con la debida seriedad y trata de definir políticas fiscales que no asfixien a familias y empresas.
Mencionó al respecto la decisión de bajar el Impuesto sobre el Valor Agregado a los alimentos de primera necesidad más consumidos, asunto que será tratado por la Asamblea Nacional, pues implica modificar una ley.
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