Tras finalizar su audiencia general en la Plaza San Pedro, el Sumo Pontífice conversó con el hijo de Cristina Navajas (1949-1976) y Julio Santucho (ambos militantes del Partido Revolucionario de los Trabajadores), y nieto de Nélida Narvajas (1927-2012), miembro de las Abuelas.
Su hallazgo fue anunciado en julio de este año, tras décadas de búsqueda por sus familiares y la agrupación defensora de los derechos humanos.
Los Santucho son una familia atravesada por el terrorismo de Estado y una historia de lucha: casi una veintena de sus miembros se encuentran entre los detenidos, asesinados y exiliados durante el régimen militar y de 10 de ellos aún se desconoce el paradero.
El Papa también saludó a una sobrina de Leonié Duquet (1916-1977), una de las monjas francesas desaparecidas durante la dictadura en esta nación.
El gesto del Obispo de Roma tiene lugar horas después de actos y discursos negacionistas impulsados por La Libertad Avanza, cuyos líderes, Javier Milei y Victoria Villarruel, realizaron comentarios ofensivos contra él y personalidades como la presidenta de las Abuelas, Estela de Carlotto.
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