En conferencia de prensa junto al ministro de Seguridad Juan Manuel Pino, la directora del Servicio Nacional de Migración (SNM), Samira Gozaine, indicó que con el apoyo del Servicio Nacional Aeronaval (Senan) duplicarán o triplicarán esas operaciones aéreas.
Ante la escalada de caminantes que llegan por la selva del Darién, más de 350 mil personas en lo que va de año, el Ejecutivo autorizó la contratación de vuelos chárter para ampliar las deportaciones y expulsiones, dijo.
Gozaine indicó que de junio a la fecha han deportado y expulsado a 452 extranjeros, entre ellos 157 colombianos, en un operativo denominado Escudo, dirigido a enfrentar a traficantes de personas que operan en Darién y a decomisar armas y drogas en esa zona fronteriza con Colombia.
Otras de las acciones frente al auge de los tránsitos ilegales y el impacto que tienen en las comunidades indígenas receptoras y el medio ambiente están dirigidas a proteger a esas poblaciones, por lo que removerán los puntos de control, sobre todo en las localidades de Bajo Chiquito y Canal Membrillo, y construirán infraestructuras para atender a los caminantes, precisó la funcionaria.
Además, confirmó que desde este viernes se reducirá el tiempo de turismo de 90 a 15 días de estadía para viajeros que entran por aeropuertos, utilizando vías formales, decisión que ventilarán en entrevistas los oficiales de migración en esas terminales aéreas y si sobrepasan ese lapso deberán pagar multas.
Gozaine explicó que las medidas que se aplicarán en los aeropuertos no serán para todos los extranjeros, ni para nacionalidades específicas, sino que el personal de seguridad tendrá la potestad de decidir a quiénes las aplican.
También el requisito de solvencia económica que se requiere para este tipo de viajero se elevará de 500 a mil dólares, a justificar en el momento de la entrada al país centroamericano.
Por su parte, el ministro Pino adelantó que la próxima semana recorrerán la selva del Darién junto a autoridades de Costa Rica, para intercambiar sobre las nuevas medidas de contención a la migración irregular.
De acuerdo con estadísticas oficiales, unas 352 mil personas han ingresado por la selva de Darién, en la frontera panameño-colombiana, con rumbo a Estados Unidos, en su mayoría venezolanos, ecuatorianos y haitianos, en ese orden; pero también se registran chinos.
Esa cifra sobrepasa en más de 100 mil a la que se consideraba récord en 2022.
En diversos foros, el Ejecutivo ha explicado los esfuerzos para tomar datos biométricos y ofrecer atenciones de salud, alimentación y alojamiento en estaciones receptoras y en las comunidades originarias, con un costo que supera los 70 millones de dólares en los últimos años, algo insostenible para la economía y que requiere de colaboración regional.
npg/ga