En una entrevista publicada este jueves por el diario Corriere della Sera, el canciller expresó que la actual crisis migratoria que enfrenta este país puede empeorar en los próximos meses, y aseveró que “no podemos quedarnos solos”, en referencia a la ayuda que se espera de la Unión Europea (UE).
“Ni siquiera Europa por sí sola es suficiente para abordar un problema tan enorme, que afecta no sólo a casi toda África, sino también a la afluencia procedente de la ruta de los Balcanes”, afirmó Tajani, y añadió que “por eso hemos implicado a las Naciones Unidas y al G20 (Grupo de los 20)”, entre otras organizaciones
Para enfrentar este problema “hacemos todo lo humanamente posible” y, entre otras iniciativas, “hemos trabajado en una gran conferencia internacional que debe ser el inicio de un verdadero proceso de estabilización del Sahel”, anunció.
“Los ministerios de Defensa, del Interior, el mío, están al servicio y trabajando para afrontar la emergencia, pero la inestabilidad de la región subsahariana, para aliviar la cual sería necesaria una gran movilización internacional, es dramática”.
“Desde esos países hay un empuje hacia el norte del continente, en particular hacia Túnez, para desembarcar en Italia y luego, una vez aquí, llegar a otros países. Pero la acogida de inmigrantes irregulares pesa enteramente sobre nuestros hombros. Estos son costos enormes”.
Además de convocar de urgencia a los embajadores de Guinea y Costa de Marfil, a quienes “pedí que haya un criterio más rígido para frenar las salidas, para aceptar las repatriaciones, estoy en contacto continuo con mis homólogos de Argelia y Túnez, quienes garantizan la colaboración, pero ni siquiera ellos pueden hacerlo solos”, agregó.
De acuerdo con los últimos datos divulgados por el Ministerio del Interior italiano, entre el 1 de enero y el 13 de septiembre de 2023, arribaron por mar a esta nación un total de 123 mil 863 inmigrantes, casi el doble que los 65 mil 517 que llegaron en igual período del pasado año.
La mayoría de los migrantes que desembarcaron en 2023 proceden de Guinea, con 14 mil 942, y de Costa de Marfil, con una cifra similar ascendente a 14 mil 120 personas, a los que se suman 11 mil 402 tunecinos y ocho mil 414 egipcios.
Se añaden siete mil 485 nacionales de Bangladesh, seis mil 722 de Burkina Faso, seis mil 253 de Paquistán, cinco mil 52 de Siria, cuatro mil 237 de Camerún, cuatro mil 200 de Mali, así como más de 40 mil de otros países, precisa ese último reporte, elaborado por el Departamento para las Libertades Civiles y la Inmigración.
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