De acuerdo con estadísticas publicadas en el rotativo, en lo que va de año han cruzado la peligrosa selva de Darién, en la frontera con Colombia, 370 mil 421 viajeros ilegales.
Panamá vive una ola migratoria irregular sin precedentes y el arribo de caminantes a los centros de recepción en la provincia de Darién, supera los dos mil diarios.
En lo que va de septiembre, solo el jueves pasado se registró una cifra inferior con mil 455.
El pasado 8 de septiembre la directora del Servicio Nacional de Migración(SNM), Samira Gozaine, anunció una serie de acciones para hacer frente a la crisis, entre ellas reforzar la deportación de irregulares mediante la contratación de vuelos chárter.
También señaló que removerán los puntos de control en Bajo Chiquito y Canaán Membrillo, para que no estén dentro de las comunidades receptoras.
Además refirió establecer barreras marítimas, para evitar que lanchas con viajeros provenientes de Colombia ingresen al océano Pacífico y el mar Caribe, del lado de Panamá.
Autoridades locales prevén que de mantenerse la tendencia, a finales de este año medio millón de personas podrían utilizar la peligrosa vía del Darién, plagada de los peligros naturales y también el acoso de bandas criminales.
Agosto ha sido el mes con el mayor registro del año; 81 mil 946 en 31 días. Esto arrojó un promedio diario de dos mil 643. El ritmo del flujo de personas de septiembre apunta a que la cifra de agosto podría ser rebasada.
En lo que va de este mes han cruzado el Tapón de Darién 28 mil 255 adultos y ocho mil 462 menores de edad.
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