Pobladores citados por el diario Al-Watan indicaron que los mercados de la cabecera provincial y de los principales municipios en esta gobernación ubicada a unos 100 kilómetros al sur de esta capital, presencian actividad normal de compra y venta, mientras las instituciones estatales reabrieron sus puertas para atender a los ciudadanos.
Residentes de esta provincia hablaron con Prensa Latina en condición de anonimato, y aseguraron que el número de manifestantes disminuyó en los últimos días a unos decenas tras comprobar la injerencia e instigación por parte de gobiernos extranjeros, en particular Estados Unidos.
Hay creciente descontento popular hacia lo que está sucediendo, ya que unos pocos manifestantes pretenden confiscar la opinión de toda la población, indicaron.
Agregaron que las demandas para mejorar la situación económica fueron distorsionadas y manipuladas hacia exigencias políticas irracionales que solo sirven a los enemigos del país
Las circunstancias excepcionales y difíciles por las que atraviesa el pueblo se deben a las asfixiantes sanciones occidentales impuestas al país, en particular la injusta y extraterritorial Ley César aprobada por la administración contra Siria, aseguraron las fuentes.
Rechazaron que algunos manifestantes estén en comunicación con partes extranjeras, algunas son las mismas causantes y autores del asedio.
Según analistas, las protestas en Sweida fueron atizadas mediante campañas mediáticas tergiversadoras y hostiles al gobierno sirio.
Las pancartas y banderas izadas muestran que estos actos están siendo manipulados indirectamente por potencias externas hostiles, y pretenden dividir, debilitar y desestabilizar a esta nación.
Denunciaron planes diabólicos de Washington de separar esta provincia del Estado sirio y unirla a las zonas ocupadas en el este del Éufrates, lo que significaría aislar a Siria por completo de su vecino Iraq, y por lo tanto, de Irán también.
También, aseguraron que el empleo de mentiras y noticias intoxicadas a la hora de cubrir los sucesos en Sweida recuerda las mismas tácticas, sucias y manipuladoras, usadas contra esta nación en los primeros años de guerra.
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