El senador Matías Walker, del Partido Demócratas, afirmó que hasta ahora el texto aprobado en el Consejo Constitucional, donde los republicanos y sus aliados de Chile Vamos tienen mayoría absoluta, dista mucho de la idea de una ley fundamental.
La extrema derecha está imponiendo normas calificadas aquí como un retroceso en materia de garantías individuales y colectivas, entre ellas prohibir la interrupción voluntaria del embarazo y varias limitaciones al papel de los sindicatos y otras agrupaciones laborales.
También intentan elevar a rango constitucional la privatización de los servicios de salud y educación, así como a las administradoras de fondos de pensiones que obtienen grandes ganancias por el uso de las cotizaciones de los trabajadores y pagan jubilaciones miserables.
De acuerdo con Walker, “lo que está saliendo hoy día (en materia de carta magna) me aleja mucho de la posibilidad de votar a favor”, un criterio mayoritario entre la población según los resultados de recientes sondeos de opinión.
A juicio del representante de Demócratas, un desprendimiento de la Democracia Cristiana, el Partido Republicano está presentando al país un programa de Gobierno, cuando el mandato es hacer una Constitución.
El mismo criterio expresó recientemente la alcaldesa de la comuna capitalina de Providencia, Evelyn Matthei, de la conservadora Unión Demócrata Independiente, quien agregó que “no arriesgaría su capital político apoyando ese proyecto”.
Matthei se perfila como eventual candidata a la presidencia de Chile por esa agrupación de derecha.
La propuesta constitucional ha sido ampliamente rechazada por partidos de izquierda y organizaciones sociales.
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