Explica que la reducción es resultado de su reingeniería administrativa, que mantenía en su nómina las 95 filiales que operaban al inicio del sexenio del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, y que en su mayoría tenían un manejo “discrecional o a modo” y funcionaban según las instrucciones de los directivos de la empresa, no del Estado.
Hasta ahora, expresa la petrolera, ha eliminado 44 filiales, y quedan 51 empresas vigentes, pero están en un proceso de aplicar la reducción de 14 más y concluir con dicho programa, precisó Pemex.
En el reporte a la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados, se indicó que las 37 empresas en funciones no se pueden eliminar por su naturaleza, ya que algunas son tenedoras de acciones de otras filiales, otras tienen utilidades y en algunos casos son poseedoras de infraestructura, lo que las hace estratégicas y no son fáciles de sustituir.
Indica que el proceso de reingeniería de la petrolera se inició en 2019 y se trata de un proceso corporativo que, de acuerdo con Pemex, tiene el propósito de generar ahorros y reducir la abultada estructura de la empresa productiva del Estado.
Agrega que, a finales del 2018, contaba con siete subsidiarias que a su vez concentraban a las 95 filiales. Se trata de Exploración y Producción, Transformación Industrial, Logística, Corporativo, Perforación y Servicios, Etileno y Fertilizantes, pero tras la eliminación de filiales y la fusión, actualmente sólo mantiene las primeras cuatro.
Transformación Industrial, la segunda de mayor tamaño en la empresa, absorbió a las tres subsidiarias que se eliminaron: Logística, Fertilizantes, Perforación y Servicios, y Etileno.
Según Pemex, la fusión de dichas empresas subsidiarias permitió trasmitir a la empresa fusionadora los recursos humanos, materiales, financieros, así como bienes, derechos y obligaciones que integran su patrimonio, información, documentación bajo su responsabilidad lo que mejora la operación y genera ahorros económicos.
El promedio anual del gasto administrativo por parte de la petrolera asciende a tres mil 242 millones de pesos (185 millones de dólares), lo que representa una disminución de 67 por ciento, si se le compara con el promedio anual que gastó la administración previa.
mem/lma