Los fanáticos tuvieron que esperar 22 largos años para ver a sus D-Backs levantar otra vez el banderín del viejo circuito, y como ocurrió aquel memorable octubre de 2001, lo ondearon en tierra ajena cuando la mayoría de los pronósticos estaban en su contra.
Un imparable de Corbin Caroll ante un envío del abridor venezolano Rangel Suárez para empatar el desafío a dos carreras en el quinto episodio y otro del venezolano Gabriel Moreno frente al relevista Jeff Hoffman para tomar ventaja, fueron las conexiones claves del partido.
En el séptimo capítulo Carroll (de 4-3 en el pleito) volvió a traer otra a casa con un elevado de sacrificio mientras los espectadores se inquietaban en las tribunas, y la tropa de relevistas usada por el mentor Torey Lovullo continuaba colgando argollas en la pizarra del Citizens Bank Park de Filadelfia. Alec Bohm con un cuadrangular en el segundo acto y Bryson Stott con un doble impulsador, ambos a la cuenta del abridor novato Brandon Pfaadt, fue todo lo que pudieron hacer los anfitriones para defender su gallardete de liga.
Cuatro rescatistas, entre ellos Paul Sewlad que fue el cargado de ponerle el cerrojo a sus rivales, formaron una barrera infranqueable en la lomita para que los nuevos campeones pudieron descorchar el clásico champagne en esta inolvidable noche.
jcm/blc
