Una nota publicada en el sitio digital informativo especializado Libero Tecnología, apunta que dieron la señal de peligro los científicos y técnicos que integran una comisión que periódicamente evalúa el estado de esa estructura con 4,0 grados de inclinación, superada en solo un grado por la de Pisa.
Garisenda se alza en el centro de Bolonia, capital de la norteña región de Emilia Romaña, junto la Torre degli Asinelli, que tiene 97 metros de altura, con 1,0 grado de inclinación, y el conjunto que conforman constituye uno de los principales atractivos turísticos de esa urbe.
Fue construida en el año 1100 y su pendiente es histórica, motivada por el hundimiento del terreno y ante el peligro de su derrumbe, en el siglo XIV se redujo inicialmente a 48 metros de sus 60 originales, para luego decretarse su total demolición, que no se ejecutó debido a que el municipio de Bolonia carencia de fondos para comprarla.
El actual alcalde de esa ciudad, Matteo Lepore, ordenó el pasado fin de semana cerrar el área alrededor de ambas torres con el propósito de evitar que las vibraciones del tráfico vehicular la afecten y realizar evaluaciones profundas de su situación, así como decidir acciones para evitar su derrumbe
La torre Garisenda fue reforzada en 2020 con tirantes metálicos de acero inoxidable, de manera de consolidar la estructura de los muros perimetrales, y se instalaron sensores para monitorear su estado , los cuales indicaron las vibraciones y oscilaciones que evidenciar el actual peligro de desprendimientos y un posible derrumbe
Las evaluaciones y tareas iniciales de mantenimiento concluirán el viernes 27 de octubre y se valoran otras posibles acciones para su estabilización, que podrían incluir el reforzamiento del terreno con la inyección de materiales consolidantes y la posible utilización de pilotes, agrega la fuente.
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