Desde que se reiniciaron las obras en agosto pasado y tras el cierre fronterizo ordenado unilateralmente por el presidente dominicano Luis Abinader, haitianos dentro y fuera del país, así como organizaciones sociales, religiosas, políticas, empresarios, campesinos y otros, apoyan las obras de deberán irrigar unas tres mil hectáreas de la llanura de Maribaroux.
Además, también donaron un millón 263 mil 835 gourdes (poco más de nueve mil 500 dólares) en especie, mientras que hasta la fecha se gastaron nueve millones 876 mil 644 gourdes (unos 74 mil 305 dólares), de acuerdo con el diario Le Nouvelliste.
La construcción del canal de riego en el río Massacre se detuvo en 2021, tras el asesinato del presidente Jovenel Moïse. Su reanudación provocó un conflicto binacional, luego que Santo Domingo aseguró que las obras desviarían el torrente.
Esta semana una delegación gubernamental integrada por los ministros de Medio Ambiente, Agricultura, así como Comercio e Industria, James Cadet, Charlot Bredy y Ricardin Saint Jean, respectivamente, se reunió en Ouanaminthe con miembros del comité de construcción del canal de riego del río Massacre y miembros de la sociedad civil.
Cadet reafirmó que el Gobierno está dispuesto a aportar su apoyo técnico y financiero al comité para que las obras puedan continuar.
Asimismo, indicó que los técnicos que enviarían tendrán la misión de evaluar las necesidades que existen sobre el terreno antes de presentar sus recomendaciones al ejecutivo para un posible apoyo económico.
De igual manera, se comprometieron con asistir a los agricultores y proveer medios para la producción de maíz y quimbombó en un periodo de tres meses, que les permita a los residentes enfrentar los desafíos del cierre fronterizo.
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