La Cámara Alta decidió en sesión extraordinaria por 33 votos de 45 votos posibles a favor mantener vigente el acuerdo denominado “Programa de Apoyo a la Transformación del Sistema Educativo”, aunque con algunas modificaciones.
Esos últimos ajustes al texto fueron elaborados por los Ministerios de Educación y Ciencias y de Relaciones Exteriores junto a varios senadores para facilitar la continuidad del tratado, que fija una ayuda de la UE de 38 millones de dólares.
Los cambios incluyen el reemplazo del término “Transformación Educativa” por el de “Fortalecimiento del Sistema Educativo”, así como la observación estricta de la Constitución Nacional para la interpretación y el cumplimiento de los anexos y cláusulas establecidos.
Las opiniones durante los numerosos análisis efectuados en ambas cámaras del Congreso mostraban divisiones entre los legisladores del gobernante partido Honor Colorado y los de las bancadas de la oposición, que rechazaban el proyecto de derogación.
El gobierno trasladó al Senado a mediados de septiembre una nueva versión del proyecto de ley modificada para lograr su aprobación, opuesta a la versión original de derogar la ley sobre el convenio con el bloque.
Parlamentarios y gobernantes, que estudian hace meses la propuesta de eliminar el tratado con la UE dilatan hace tiempo el debate para suprimirlo, en previsión de los daños materiales que su ausencia causará al sector educacional.
La ausencia de esos fondos, por ejemplo, dejaría sin alimentos para la merienda y materiales de estudio a miles de alumnos, según el periódico ABC Color.
Según el director de administración del Ministerio de Educación y Ciencias, Óscar Stark, si falta ese respaldo, también 47 mil bachilleres quedarían sin kits escolares y sin vauchers para sus estudios científicos.
La versión original buscaba modificar la Ley 6659/2000, que respalda institucionalmente el convenio entre la UE y Paraguay para la Educación, cuestionado por autoridades críticas de su presunta tendencia contra la soberanía.
El nuevo proyecto alega que los recursos aportados por la UE son invertidos en acciones que potencian la política educacional sobre aprendizaje, escritura, comunicación, desarrollo del pensamiento lógico, matemático y científico y sustenta la alimentación y los kits escolares.
La propuesta del borrador garantiza que todas las cláusulas y anexos del convenio responderán a las disposiciones al respecto de la Constitución Nacional y a lo establecido en su artículo 48 sobre “la Igualdad de los derechos del hombre y la mujer”.
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