La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), es la principal institución que resguarda la salud y las pensiones en esta nación centroamericana. La Caja, como la denominan, llegó este 1 de noviembre a su aniversario 82 de creada.
Un artículo del intelectual costarricense Manuel Delgado, publicado en el sitio Surco digital, destaca además que Costa Rica fue revolucionada en su institucionalidad con aquellas reformas.
Hace 82 años, en un día como hoy, pero 1941, el presidente de entonces Rafael Ángel Calderón Guardia puso el ejecútese a la ley de creación de la Caja Costarricense del Seguro Social, aprobada días antes por el Congreso Constitucional de la República.
Aunque este proceso no representó una revolución política, sí forjó la unidad de las tres fuerzas más importantes de la época: por un lado, el presidente Calderón Guardia y su equipo, a los que la oligarquía tenía decidido sacar del poder por la fuerza.
En segundo lugar, la iglesia católica, jefeada por un pastor inteligente y sensible; y en tercer lugar el Partido Comunista, que ocupaba un espacio político respetable pero que, sobre todo, lideraba un movimiento de masas, social y sindical de enorme fuerza.
En un extenso análisis sobre sus orígenes y causas, el también periodista y filósofo explica que la creación de la Caja con sus dos grandes ramas, cuidado de la salud y pensiones, puso a Costa Rica a la vanguardia mundial en materia de seguridad social.
En 1952, es decir 11 años después, la Organización Internacional del Trabajo adoptó el Convenio 102, obligatorio para todos los países, que contenía garantías menores que las que ya disfrutaban los costarricenses, rememora.
Pero en 80 años la vida ha cambiado. Hoy los regímenes de salud y menos aún los de pensión no pueden sostenerse solo con el aporte de los trabajadores y sus patronos,destaca.
Si queremos un sistema de seguridad social moderno y sostenible ya no basta con pagarle a la Caja las deudas y evitar la sustracción de sus recursos, es necesario inyectarle enormes recursos desde el fisco, es decir, desde el Estado. Pero es lo contrario de lo que ocurre en la realidad.
Este país está gastando en salud una cifra de su PIB inferior a los de El Salvador, Nicaragua, Panamá y Honduras (que van del 7,3 al 8,4%) y apenas un poquito superior a las de Guatemala y Belice.
El país que mayor porcentaje de su PIB le dedica a la salud es Cuba, con un 9,7 por ciento Cuba es además el país que tiene más médicos por habitante, 6,7 por cada mil habitantes. El promedio latinoamericano es de dos médicos, resaltó.
El promedio de la OEDC es de 3,5. Un informe de la BBC se pregunta de dónde saca Cuba tantos médicos. Una razón es que existe una convicción nacional en favor de la salud y de la unión entre salud y educación, es decir, la formación de médicos juega un rol fundamental en la sociedad. Ese país tiene 24 facultades de medicina y 52 escuelas de enfermería.
Costa Rica, por su parte, ocupa el quinto lugar con peor proporción de médicos y enfermeros por cada mil habitantes en la OECD. Por una parte, hay una terca oposición a abrir matrícula en las universidades, en especial con relación a los de especialistas, analizó.
ro/alb