La llamada “enfermedad silenciosa”, segunda causa de muerte entre los hombres del país y la primera entre las afecciones oncológicas, registra unos mil 700 casos al año, según el Atlas de Mortalidad del Cáncer del Ministerio de Salud Pública, citado por el diario.
Por su parte, el Instituto Nacional del Cáncer reportó 148 nuevos casos de la enfermedad en 2020, mientras en 2021 fueron 191, en 2022 subieron a 215 y en lo que va del actual año suman 118.
Los decesos por cáncer de próstata, que superaron a los de pulmón en un lapso de cinco años (2015-2019), son más frecuentes en la capital y en el aledaño departamento Central, con un promedio anual de unas 160 muertes, según un análisis del Programa de Prevención de esa cartera, liderado por el doctor Arnaldo Vázquez.
“Es una enfermedad –explica el experto- que en estadios iniciales es silente. Significa que prácticamente empiezan a aparecer los síntomas ya en estadios avanzados, por lo cual es muy importante acudir a tiempo a los controles rutinarios del urólogo”.
El médico recordó que los principales síntomas del padecimiento son dificultades al orinar –flujo lento o debilitado– y la necesidad de hacerlo con frecuencia, sobre todo en la noche, y también las huellas de sangre en la orina o en el semen, así como la disfunción eréctil.
La próstata –recordó el doctor Vázquez– es una glándula ubicada debajo de la vejiga y delante del recto, que solamente tienen los hombres y produce parte del líquido que conforma el semen.
Autoridades locales de salud implementan cada año la campaña Noviembre Azul para sensibilizar sobre los controles para detectar el cáncer de próstata en pacientes de 45 a 50 años o si hay antecedentes en la familia, pues una detección precoz permite tratar mejor la enfermedad.
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