La operación fue coordinada con la cartera del Interior y contó con la colaboración de la Comisión Nacional Forestal y el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres.
Entre los elementos donados figuran cascos, pantalones y camisas resistentes al fuego, también conocidas como ignífugas, raciones de alimentos, agua mineral y otros bienes.
La carga llegará a Santa Cruz de la Sierra a bordo de un avión de la Fuerza Aérea de Chile, precisa un comunicado de la cancillería.
De acuerdo con la subsecretaria de Relaciones Exteriores, Gloria de la Fuente, apenas se recibió la solicitud de las autoridades bolivianas se comenzaron a hacer gestiones.
“A comienzos de año sufrimos una situación similar que pudimos enfrentar, en gran parte, gracias a la desinteresada colaboración de muchos países”, señaló la funcionaria.
Las llamas destruyeron más de tres millones de hectáreas de bosques y ocasionaron la muerte de casi seis millones de animales, según informes de las autoridades bolivianas.
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