Los ministros de Comercio de la UE y el país norteño celebrarán un consejo, donde buscarán poner punto final a la mencionada disputa, que estalló en 2018, cuando el entonces presidente estadounidense, Donald Trump, impuso altos aranceles al acero y el aluminio de Europa.
Trump consideró que los productos de la UE debían ser sometidos a un arancel del 25 por ciento, lo cual provocó una airada reacción del bloque comunitario y dificultades en el comercio de aviones de la Boeing estadounidense y la Airbus europea.
Las negociaciones buscan un acuerdo global sobre venta de acero y aluminio sostenibles, con un resultado que funcione para ambas partes.
Otro asunto complicado en los nexos de Washington y Bruselas pasa por la extensión de una legislación norteamericana para reducir la inflación, pero perjudicial para Europa, pues facilita la instalación de sus empresas del sector de energía renovable en territorio del país norteño.
Durante la reunión de mañana, los ministros europeos también debatirán sobre el acuerdo de asociación con Mercosur (Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, mientras Venezuela y Bolivia están en proceso de incorporación).
En su momento, la UE intentó imponer postulados de última hora a Brasil sobre asuntos medioambientales, una posición que fue rechazada por el presidente Luiz Inacio Lula Da Silva.
Además, los expertos afirman en esta capital que será necesario esperar por la posición del recién elegido presidente argentino, el ultraderechista Javier Milei, contrario a la pertenencia de su nación al Mercosur.
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