El comandante Estratégico Operacional de la FANB, general en jefe Domingo Hernández, detalló a través de su cuenta X que la operación tuvo lugar en la línea geodésica fronteriza del estado venezolano de Apure, en el suroeste, con Colombia.
“Nuestro territorio nacional no será depósito del crimen trasnacional, nuestros parques nacionales y áreas bajo administración especial son áreas protegidas, no serán plataforma de la delincuencia organizada ni grupos Tancol”, indicó.
Subrayó que Venezuela “es un territorio de paz, de derecho y de justicia”.
Hernández señaló que el Estado bolivariano lucha a diario por todos los medios contra el flagelo del narcotráfico en todos los espacios nacionales.
Aseguró que la Fuerza Armada, los organismos de seguridad ciudadana y la Superintendencia Nacional Antidrogas no permitirán que el país sea utilizado “como plataforma terrorista de tráfico de drogas, somos un territorio de paz”, reafirmó.
El General en Jefe enfatizó que las estructuras que se instalen en el territorio nacional “serán destruidas conforme a nuestras leyes soberanas”.
Los militares destruyeron, además de las dos aeronaves capturadas, una vivienda que funcionaba como alojamiento y depósito logístico para el apoyo de las operaciones aéreas del narcotráfico, un puesto de observación y seguridad de hangar y una pista no autorizada con balizaje nocturno improvisado.
En el lugar fueron decomisados también un camión 350, tres motocicletas, seis GPS, cinco radios portátiles, una computadora portátil, dos teléfonos celulares, un módem de wifi, una antena satelital, 800 litros de gasolina y 400 litros de combustible de aviación.
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