Al intervenir en la Cumbre de Acción Climática Local, el titular aseguró que el éxito de la COP28 también se medirá en pueblos, regiones y estados de todo el mundo.
Los líderes locales suelen ir más lejos y más rápido que sus gobiernos nacionales para abordar la crisis climática, reconoció el alto representante.
Guterres saludó iniciativas en esos niveles para disminuir el uso de combustibles fósiles, crear empleos verdes, limpiar el aire contaminado e invertir en infraestructura sustentable y sistemas de transporte público.
No obstante, insistió en la necesidad de desarrollar planes de transición integrales y detallados en la ruta hacia la transición energética a niveles locales.
Al mismo tiempo, pidió un asiento para los representantes de comunidades y ciudades en la mesa de los gobiernos nacionales a la hora de desarrollar políticas y regulaciones climáticas.
«El éxito o el fracaso de estos nuevos planes climáticos nacionales se medirá a nivel local, y ustedes deben participar en cada paso del camino», dijo.
Por último, el secretario general llamó a los representantes a sumarse a la revolución de las energías renovables con el compromiso mundial de limitar el calentamiento global a 1,5 grados Celsius.
«Estamos acelerando hacia un aumento de temperatura de tres grados, y aún no mostramos signos de desaceleración. Al mismo tiempo, los países en desarrollo se quedan sin el apoyo que necesitan para adaptarse a la carnicería que los rodea y dar el salto hacia un futuro renovable», advirtió.
En la COP28, el mundo debe frenar, urgió el máximo responsable de la ONU al convocar a «cambiar las reglas del juego, pensando en grande».
«Unámonos y trabajemos como uno solo para proteger a todas las comunidades de la crisis climática e impulsar el futuro renovable, sostenible y equitativo que merecen las personas y el planeta», dijo.
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